Son muchos los Mitos y Bulos que existen sobre los Descalcificadores de Sal y Resina. Con este artículo queremos debatir esas opiniones, para que así, pueda ser totalmente objetivo a la hora de elegir el sistema de descalcificación que más le favorezca.
El Agua Descalcificada no se puede Beber
Son muchas las personas que piensan que el agua generada por una descalcificadora con sal y resina no puede ser consumida, debido a la cantidad de sodio (Na) introducido en el proceso de ionización. Para desmentir esa idea, hemos de indicar que un litro de agua descalcificada ronda entre los 75 y 100 mg de sodio (Na), que si lo comparamos con una rebanada de pan blanco, que tiene 120 mg, es prácticamente nada.
También existen opiniones sobre la falta de elementos tan esenciales para nuestro el organismo como pueden ser el calcio y el magnesio. A ese respecto podemos indicarles que los descalcificadores de última generación, llevan instalados una válvula by-pass, cuya función es agregar una pequeña dosis de agua de la red principal. De esta forma el agua blanda que circula por nuestra vivienda no está totalmente exenta de calcio y magnesio.
Dificultad para Enjuagar la Piel y Cabello por exceso de Jabón en el Agua Descalcificada
Una de las consecuencias principales que observamos con el exceso de cal en el agua, es la poca espuma que podemos conseguir con una dosis de jabón, tenemos que utilizar más de lo necesario para generar la espuma deseada.
” El agua con exceso de cal satura los poros de la piel, dejándola deshidratada y el cabello sin brillo “
Cuando nos duchamos con el agua limpia que nos proporciona el descalcificador, la piel se nos queda suave e hidratada y podemos llegar a tener la sensación de no habernos enjuagado correctamente.
Los Descalcificadores de Sal son muy Costosos y Requieren de mucho Mantenimiento
Un descalcificador de Sal no solo nos ahorrará dinero, sino que nos dará calidad de vida. Tras realizar una pequeña inversión inicial, al comprar el descalcificador, empezaremos a notar el ahorro económico.
Si la vida útil de cualquier electrodoméstico; lavadora, lavavajillas, calentador eléctrico, planchas de vapor, etc., en condiciones normales, es de unos diez años, cuando está presente la cal en nuestro sistema hidráulico, ese tiempo se reduce notablemente.
Otro factor a tener en cuenta es que la cal incrustada en nuestras tuberías hace de aislante térmico, reduciendo el calentamiento del agua en un 29%, por lo que tendremos que consumir mas recursos para llegar a la temperatura deseada.
El agua descalcificada requiere de 50 % a 75 % menos de detergente para la ropa y platos, ahorrando también en detergentes y pastillas antical que utilizara antes de comprar la descalcificadora de agua.
Descalcificadores sin Productos Químicos
Estos descalcificadores de agua, o más bien desincrustadores de cal, utilizan un método de cristalización de la cal, para que así, esta no pueda adherirse e incrustarse en las tuberías y resistencias de los electrodomésticos.
Debemos tener en cuenta que estos desincrustadores, o como también se suelen denominar Descalcificadores sin Sal, no eliminan la cal de nuestra agua. En los casos, que el grado de dureza del agua es muy alto, tras el proceso de cristalización, la dureza seguirá existiendo.
Al realizar el Proceso de Regeneración, estamos dañando el Medio Ambiente
Al contrario de los residuos expulsados por otros electrodomésticos, tales como lavadoras y lavavajillas, que expulsan detergentes y elementos que si dañan el medio ambiente, tras diversos estudios, se confirma que la descarga de salmuera de los descalcificadores en los desagües de las viviendas, no afectaba negativamente en absoluto al medio ambiente. Estos residuos salinos van a parar al mismo lugar donde confluyen con gran cantidad de calcio y magnesio, contrarrestando el efecto del sodio y ayudando a mantener y sostener la permeabilidad del suelo.
Aunque hay que dejar claro que los estudios también concluyen que no es conveniente descargar los residuos en pozos secos o zanjas.